La última fortaleza...

Estos últimos días he estado hablando sobre lo que importa el timing en la vida. Ya sea en el amor, en el contexto laboral, en todo...

Cuantas oportunidades hemos dejado pasar, hemos perdido, se nos han escurrido de entre los dedos.
Todos esos amores no sincronizados, correspondidos bajo la superficie pero incapaces de coincidir en el momento correcto.

Ella tiene pareja, luego la tienes tu pero ella no, una danza caprichosa que nos hace perdernos relaciones que pudieran ser increíbles y que muchas veces con casi total seguridad hacernos mas felices.

Esos tic-tacs que van a contratiempo, ese engranaje que llega tarde, esa canción desacompasada.

Todas esas veces que te has preguntado que hubiese ocurrido, todos esos "what if" que solo se escribieron en tu imaginación.

Todos esos momentos que te planteaste romper el compás y elegir tu propio tempo pero que nunca llegaron, que faltaron ganas y que sobró miedo.

Me pregunto si algunos de esos hilos que alguna vez se tocaron sin coser, esas lineas que se juntan y se separan, que a veces viajan paralelas sin cortarse, se volverán a encontrar con el timing correcto.

Ahora que esos encuentros han pasado me arrepiento de no haber dicho que es lo que sentía, de ser tan idealista y no buscar la felicidad sin anclarme a nada ni nadie.

Me estoy haciendo viejo y "egoísta" pero cada día tengo mas claro que tengo que luchar por lo que quiero y mirar por y para mi de una forma mas intensa.


"Evolve per factum"