La última fortaleza...

A quien quiero engañar...

Por qué me sigo sintiendo estúpido?

Definitivamente creo que todo es como lo pensaba en un primer momento, falso, incoloro, inodoro, podrido.

Como cuando tenia 16 años y le daba vueltas a mi teoría del egoísmo.

Hay dos tipos de personas, las egoístas y las muy egoístas.

Hay que afrontarlo, todos somos egoístas por naturaleza, todos buscamos nuestro beneficio, nos movemos por interés, mentimos por interés, queremos por interés...

Por que nos gusta tanto suavizar las cosas, para quedar bien tal vez, para no tener que enfrentarnos al juicio del resto de personas o lo que es peor a nuestro propio juicio. Aquel que lo dicta nuestro honor, ética o como quiera que se llame esa parte cada día mas olvidada, cada día mas difícil de encontrar en la gente.

O acaso no existe y es tan solo una lucha de diferentes puntos de vista, de experiencias que a lo largo de la vida nos han enseñado un camino correcto para nosotros.

Que difícil es encontrar a alguien que asuma sus errores como propios, que se plante, que no le de la vuelta a la tortilla. Que no tome al resto de la gente por estúpidos.

Que fácil es la gente de descifrar, manipular, influir, de leer...

Por mi experiencia la gente es bastante simple. Siempre van hacia algo que quiere. Algo tan simple como ir a comprar pan, o tan complicado (o no) como buscar esa comfort zone. Esa zona donde no tenemos que tomar decisiones complicadas, donde nos regalan los oídos, la estabilidad, un sofá donde acurrucarnos mentalmente y dejarnos llevar.

Me encanta describirme como un facilitador, me encanta poner ciertas cosas fáciles, toquetear aquí o allá, limpiar tu conciencia, quitarte un peso de encima, un dolor, una decepción, en definitiva, toquetear tu ética, decirte lo que quieras oír, alcanzar tu paz, tu comfort zone.

Pero en el fondo sabemos que siempre quedara esa pequeña duda, esa que dicta el corazón, el rinconcito mas olvidado de tu mente.

Nada nuevo bajo el sol, mas de lo mismo, otros ojos, mismo espejo. Somos simples.

De nada sirve jugar al blackjack si no tienes twenty-one. Si no eres el crupier de este juego. Porque la banca siempre gana.

Mas ligero que nunca...

Han cambiado tantas cosas, pero con la misma esencia, personas que van y vienen como las olas de un mar agitado, todas parecen las mismas pero en el fondo sabes que son pocas las que quedan.
Señales de humo, conversaciones perdidas, miradas bizcas, corazones viciados, mentes débiles.

Movimientos en vano, palabras fútiles, lagrimas sin sal.

You make your point and left. That's the only thing you needed, drop that backup so you could fly.

Quitar la cuña que impide cerrar la puerta, quemar la gasolina, arrancar el coche...

DRIVE!!!